Cámara de la Industria de la Construcción

Nuestro gremio nació con la visión de empresarios y profesionales que vieron la necesidad de agruparse para encontrar solución a los problemas que afectaban al sector de la construcción y de esta manera brindar su aporte de manera más efectiva a la sociedad ecuatoriana.

El 14 de septiembre de 1962 se conformó la Cámara Ecuatoriana de la Construcción (CAMECO). Desde aquel tiempo nuestra Cámara ha contado entre sus socios a las principales empresas de infraestructura, proveedores de materiales, inmobiliarios, financiamiento, consultoras y profesionales más importantes del país. En base a la aprobación del Ministerio de Industrias y Productividad, a partir de la emisión del Acuerdo Ministerial del 13 de junio de 2013, la Cámara de la Construcción de Quito se transformó en la Cámara de la Industria de la Construcción - CAMICON.
Los objetivos que motivaron la conformación de nuestra Cámara siguen vigentes, más aún ahora que por circunstancias políticas la agremiación es una opción voluntaria, lo que ha afectado directamente a la mayoría de organizaciones gremiales y profesionales.
Como ustedes conocen, nuestra Cámara es el gremio más activo y protagónico de la construcción; permanentemente participa de manera propositiva con entidades del gobierno nacional y seccional en la búsqueda de soluciones a los problemas que afectan al sector.

Nos esforzamos cada día por mejorar los servicios a los socios, seguros de fianza, vida, salud, asistencia técnica y jurídica. La capacitación permanente de los profesionales es una de las actividades que más dinamismo ha tenido en la institución.

La Feria Internacional de Construcción y el Congreso Internacional de Construcción de Infraestructura y Vivienda, en cada edición van mejorando.

La visión gremial ahora se dirige a fortalecer al sector, a ampliar su presencia en todos ámbitos de la construcción.

Con estos antecedentes, surgen varios retos que deben ser asumidos con una visión de futuro y compromiso de unidad nacional, que tiendan al mejoramiento de la industria de la construcción en el país, basada principalmente en la preparación técnica y profesional que contribuyan al fomento de la capacidad de las empresas ecuatorianas, de sus trabajadores y por ende de miles de compatriotas que se benefician directa o indirectamente de esta actividad, motor de la economía.